La estrategia de Gallardo para vencer al Barcelona

El técnico de River Plate parece haber optado por un arriesgado esquema para enfrentar al Blaugrana con una clara idea ofensiva

Las últimas actuaciones del Barcelona lo están volviendo, así parece, en un equipo demoledor. River no quiere quedarse atrás y busca llegar al Mundial de Clubes con un manual que pregone el famoso "cuchillo entre los dientes" en donde la defensa jugará al límite, como en sus mejores épocas, y los costados serán pura explosión. Si bien se pagó caro con la eliminación de la Copa Sudamericana, el Muñeco Gallardo implementó un arriesgado esquema táctico con tres defensores en el fondo, cuatro mediocampistas con volantes laterales rápidos, un enganche proclive a sacar pases quirúrgicos y dos delanteros que no perdonen en los últimos metros. El famoso número de teléfono 3-4-1-2 que, si bien está encarrilado para ser utilizado, aún no tiene a sus intérpretes bien definidos. Esta táctica se empleó ante Huracán al límite, pero no dio resultados. Línea por línea, el fondo que lo conforman está compuesto por: Gabriel Mercado, Jonatan Maidana y Eder Álvarez Balanta. Puede que en el carril izquierdo donde se para el colombiano tome un poco más de protagonismo Emanuel Mammana, aunque el técnico riverplatense tiene pensado seguirle dando un poco más de crédito a Álvarez Balanta. Mientras que en el sector medio, una carta que para la filosofía Gallardo es fundamental es tener sorpresivos volantes laterales, aunque Milton Casco y Leonel Vangioni no mostraron una solución deseada. Cabe destacarse que es más que probable que el uruguayo Sánchez se pare en la zona del ex Newell's cuando Leonardo Pisculichi se recupere. Claro que en el centro, el DT mantendrá su confianza en el doble cinco de Leonardo Ponzio y Matías Kranevitter. El primero le da presión mientras que el segundo siempre garantiza un primer pase bien dado. La lesión de Pisculichi, cerca de la tibia izquierda, obligó a Gallardo a poner como creador a Carlos Sánchez. A su vez, las principales cartas ofensivas en las que confía en la delantera son Lucas Alario y Rodrigo Mora. Alario es un abonado de goles claves mientras que el uruguayo puede llegar a tener flojos momentos, pero cuando aparece es determinante. Parece que la idea está clara, y con ese esquema Marcelo Gallardo irá a Japón. El tema son los nombres sin dejar de lado que el técnico millonario siempre prioriza a "los que mejor están físicamente". De eso se tratará el futuro inmediato, de encontrase con elementos del pasado. Y para eso Marcelo Gallardo quiere que el próximo lunes 7 de diciembre sus muchachos ya se encuentren en Osaka preparando de lleno el Mundial de Clubes.